INTRO: La Luciérnaga, periodismo para que no te engañen. Un proyecto de Ocote.
NARRACIÓN: Hola, Soy Lourdes Álvarez, periodista para La Luciérnaga.
NARRACIÓN: ¿Cuántas veces has escuchado las frases «a las mujeres se les cuida, pero los patojos se cuidan solos» o bien «los hombres no lloran, son valientes y no cuentan sus cosas»?
Lamentablemente esos comentarios fomentan estereotipos, acciones o pensamientos equivocados sobre lo que un hombre debería ser.
A partir de esas posturas que fomentan el machismo y otra serie de problemas, también se promueve el silencio, un extremo peligroso cuando se trata de denunciar violencia o abusos sexuales en contra de los niños. En Guatemala, se estima que cada día un niño es víctima de ese delito, según la Asociación Nacional Contra el Maltrato Infantil (Conacmi).
Esa organización indica que aunque en Guatemala cerca del 90% de casos de violencia y abuso sexual reportados al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) son de niñas, adolescentes y mujeres, también hay casos de niños y jóvenes víctimas, que oscila entre un 10% o 15%, pero lamentablemente por lo general no se reporta y se esconde por el estigma social que puede provocar.
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Haroldo Oquendo, representante legal de Conacmi, indicó que realizan diversas actividades que incluyen campañas de comunicación para sensibilizar a nivel comunitario, familiar, educativo y en todos los sectores de la sociedad, para que se logre identificar las formas de abuso sexual que también afectan la vida de los niños.
ENTREVISTADO: «Sabemos que el abuso sexual es mucho más frecuente en niñas y jóvenes mujeres, pero en varones también es importante identificarlo y atenderlo. Hemos notado que existe una gran cultura de silencio, no lo reportan, lo esconden y existe una serie de dificultades que hacen que los varones no tengan acceso a procesos de atención. Hacemos un llamado a la reflexión para que estemos atentos, porque un niño también está en riesgo de abuso sexual».
NARRACIÓN: A nivel global, la Organización Mundial de la Salud indica que la violencia sufrida en la infancia afecta a la salud y el bienestar a lo largo de toda la vida, pero se han recogido pruebas que demuestran que se puede prevenir.
En la Agenda de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, un compromiso que firmó Guatemala como parte de una alianza mundial junto a más de 190 países se busca «poner fin al maltrato, la explotación, la trata y todas las formas de violencia y tortura contra los niños» algo que para Haroldo Oquendo también involucra educación con acceso a información confiable y segura.
NARRACIÓN: Recuerda que los niños también tienen derecho a expresar sus sentimientos o inquietudes, así como a recibir cuidados y protección que le permitan una vida feliz, plena y libre de violencia.
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OUTRO: La Luciérnaga es un proyecto especial de Ocote. Se produce con fondos de Seattle International Foundation y Philantropy Lab.
La investigación, el guion y la locución las hice yo, Lourdes Alvarez. La edición de textos en castellano es de Alex Maldonado. El montaje sonoro es de Carlos Diaz.
Si tienes dudas o comentarios escribe a factica@agenciaocote.com o envía un mensaje de WhatsApp 3756-8119.
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